El 1 de septiembre de 2023 la dirección de Mecaner comunicó al Comité de empresa la decisión del grupo Stellantis de cerrar la fábrica, despidiendo a sus 148 personas trabajadoras. Mecaner es una empresa ubicada en Urduliz (Bizkaia) cuyo trabajo se ha centrado en la construcción de troqueles de estampación en frío para piezas de carrocería exterior de vehículos: aletas, laterales, capós, maleteros, portones y techos.
Para hacer frente a esta amenaza de cierre, desde el Comité de empresa de Mecaner se le propuso al Ayuntamiento de Urdúliz financiar la elaboración de un plan de transición ecosocial para la fábrica. Desde Garúa asumimos este reto, y elaboramos este trabajo de investigación compuesto por cuatro elementos principales:
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Breve catálogo de productos alternativos que podrían fabricarse a partir de la reconversión. La elección se basa en las capacidades actuales y en criterios de transición ecosocial.
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Descripción de la viabilidad técnica de la reconversión hacia esos productos, señalando qué dificultades y obstáculos deben superarse.
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Modelos de gestión y propiedad propuestos para el proceso de reconversión.
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Estimación aproximada de la inversión requerida para adquirir nueva maquinaria e identificación de las posibles fuentes de financiación.
Este informe se concibe como una herramienta de uso sindical para la defensa de los puestos de trabajo de Mecaner y el avance hacia sociedades más justas y sostenibles, dando diferentes propuestas de futuro para su actividad. Sus propuestas están condicionadas por las peticiones de la plantilla de Mecaner.
La amenaza de cierre de Mecaner debe situarse en un contexto más amplio marcado por tres fenómenos: crisis ecológica, pérdida de empleo industrial y retorno de la política industrial en Europa. Al mismo tiempo, no es únicamente Mecaner quien está amenazado: todo su sector está en una situación crítica y con un futuro incierto. La caída en la venta de automóviles hace que los grupos empresariales intensifiquen sus estrategias de reducción de costes, con un fuerte impacto sobre la industria auxiliar y las personas empleadas. A todo esto se le suma el impacto ecológico de la automoción, que tiene un doble efecto: profundiza la crisis ecosocial y pone en riesgo los miles de empleos que dependen del sector, Por estos motivos, consideramos adecuado explotar otros sectores y productos que vayan más allá de la automoción.
La identificación de alternativas productivas busca abrir el abanico de posibilidades para evitar el cierre de Mecaner y el despido de su plantilla. Buscamos señalar cómo Mecaner podría vincularse con sectores industriales que podrían aumentar su actividad durante los próximos años y están recibiendo financiación pública para impulsar la fabricación de las tecnologías asociadas a la transición energética.
A partir de varios criterios, identificamos cuatro alternativas productivas: (1) carcasas de baterías para vehículos eléctricos, (2) intercambiadores de calor de placas, (3) placas bipolares para electrolizadores y (4) laminaciones para máquinas eléctricas. Cada una de ellas está vinculada a la descarbonización de diferentes sectores de la economía, como la movilidad, la edificación, la industria o la generación eléctrica. En todos los casos, estas alternativas productivas se encuentran estrechamente relacionadas con diferentes políticas públicas de la llamada transición ecológica y políticas industriales aprobadas a nivel europeo, estatal y autonómico. Por este motivo, señalamos cómo el apoyo e involucración activa del Gobierno Vasco es crucial para hacer posible esta reconversión de la producción que evite el despido de las personas trabajadores de Mecaner.
En lo respectivo a los modelos de gestión y propiedad, describimos las cuatro posibilidades existentes: (1) evitar la deslocalización de Stellantis, (2) entrada de capital público en la propiedad, (3) búsqueda de un inversor externo y (4) recuperación de la empresa por sus personas trabajadoras. Existen múltiples herramientas con las que las instituciones públicas podrían impulsar, apoyar y financiar cada una de estas vías.
Enfrentar un proceso de cierre con una propuesta de reconversión industrial en un sentido ecológico permite que los trabajadores y trabajadoras asuman mayor protagonismo en la defensa de un futuro para su empleo que avance hacia una transición ecosocial justa. Permite poner en discusión elementos centrales de la transformación de la economía: ¿qué fabricamos?, ¿cuánto fabricamos?, ¿cómo lo fabricamos?, ¿para quién lo fabricamos? Y permite también disputar las políticas industriales “verdes” que están destinando grandes cantidades de dinero público a empresas privadas.
La amenaza de cierre en un escenario turbulento puede asumirse con resignación o puede aprovecharse como oportunidad para ensayar nuevas herramientas sindicales con la que responder a una situación crítica. Aquí apuntamos en esa segunda dirección, porque creemos que mejora la correlación de fuerzas en favor de los y las trabajadoras. Somos plenamente conscientes de que revertir el cierre de una fábrica y evitar el despido de su plantilla es un reto enormemente complejo, y que una transformación de las características planteadas no es un proceso rápido ni sencillo. Por eso insistimos en que lograr la implicación activa de las instituciones públicas es crucial.
También somos conscientes de que los procesos de reconversión industrial son treméndamente complejos. Las alternativas que aquí planteamos no son ideales y tienen sombras no menores. La decisión última de qué camino tomar corresponde a la plantilla de Mecaner, pero, sea cual sea, requerirá del apoyo de los movimientos sociales vascos.
Con este informe esperamos aportar una herramienta de uso sindical útil que ayude en la defensa de los puestos de trabajo y aporte aprendizajes para futuras experiencias.
Un futuro para Mecaner que permita avanzar hacia una transición ecosocial es posible. Mecaner ez itxi!
Acceso al informe: AQUÍ